Cuando la marca cambió de dueños se gestó un refresh, entre una cosa y otras salieron muchos expertos a dar su opinion, si perdía esencia o no; muy a pesar de ello, seguro había un equipo de diseño que evaluó todas las posibilidades, me gustaría creer que si.
Pasados los meses al ir a cualquier local de la cadena puedes evidenciar que la gente sigue consumiendo el pollo a pesar de los cambios mínimos – no de identidad visual – solo la tipografía que acompaña al imagotipo según la situación.
Entonces, el desplazamiento de la imagen vieja no ha sido progresivo sino muy lento, propósito? que pueda terminar de encajar en el público? No lo se, pero el resto de elementos agregados que la conforman me parecen bastante acertados incluyendo el logo, que no es mas que la palabra Arturos, el imagotipo se mantiene supongo para encontrar esa esa idea de familiaridad que tanto busca la gente.
Pero haciendo un ejercicio mas profundo me recordé de aquella discusión generada por mi amigo diseñador Edgardo Rondón cuando escribió un tweet “Si yo hubiera diseñado el logo de Arturo’s.” acompañado de las fotos asociadas a esa id. Algo que a mi parecer como propuesta estuvo bien logrado y pensado en referencia a como darle un giro positivo a una marca ya establecida, pero la cantidad de odio y discursos sin fundamento respecto a como debería o no ser una marca o su identidad deja mucho que desear respecto a la poca o nula referencia del diseño. Ahí se los dejo.